El concejal de Urbanismo, Jesús García, ha explicado que este avance del PGOU estará en exposición pública hasta el mes de diciembre y aunque «no se es una redacción acabada, sino una visión general de las líneas fundamentales» del futuro planeamiento, el equipo de Gobierno quiere abrirlo a la participación ciudadana.
El documento, que recoge «aspectos genéricos», como los usos del suelo, las zonas de desarrollo residencial o viario, podrá ser conocido por los torrelaveguenses para que aporten por escrito sus sugerencias, que previamente pueden consultar con el equipo redactor, que varios días a la semana atenderá al público.
Se trata, ha afirmado Jesús García, de «enriquecer, matizar o contrarrestar» los contenidos del avance del PGOU y aunque está claro que «todas las sugerencias no podrán ser tenidas en cuenta», el equipo de Gobierno quiere conocer la opinión de la ciudadanía.
La exposición pública es para el concejal «el proceso de mayor importancia de toda la revisión», porque servirá para «canalizar la expresión y la opinión» de los vecinos del municipio.
En cuanto al contenido del avance, que ya se ha hecho llegar a los diferentes grupos políticos, Jesús García recordó que marca unos objetivos o «acciones fundamentales», como la integración de los barrios periféricos en el conjunto de Torrelavega, o «acercar la ciudad a la propia ciudad», contemplando la permeabilización o soterramiento de las vías de Feve.
La revisión del PGOU define también la localización de las zonas industriales, centrada en la zona sur del municipio, o la creación de un tercer anillo viario, que mejore la vialidad y el flujo circulatorio.
Así mismo, se presta especial atención a «un tratamiento más ambiental y sostenible de la ciudad», con la previsión de corredores verdes, no sólo en los lugares tradicionales para este tipo de actuaciones, como las márgenes fluviales, sino en redes viarias y calles.
En este sentido, el concejal de Urbanismo ha señalado que el objetivo es doble: conseguir que la movilidad se haga por «entornos más agradables», y utilizar esos corredores verdes como «pantallas» contra la polución acústica y ambiental en Torrelavega.