Inaugurado el museo en memoria del ciclista Vicente Trueba

La alcaldesa de Torrelavega, Blanca Rosa Gómez Morante, y el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, han inaugurado el museo en memoria de Vicente Trueba, conocido como La pulga de Torrelavega, con un acto al que asistió la viuda del ciclista, Josefina Bedia, que recientemente donó los objetos, fotografías, trofeos y recuerdos, en los que se recoge la vida personal y deportiva del corredor.


El museo está ubicado en una de las salas del pabellón deportivo que también lleva el nombre de Vicente Trueba, y a su inauguración asistieron decenas de personas, entre las que había familiares, amigos, ciclistas de la época de La pulga de Torrelavega, representantes de entidades deportivas y sociales, y autoridades regionales y locales.


La viuda del corredor, muy emocionada, ha asegurado que para ella todos los recuerdos y fotografías tienen un enorme valor sentimental, pero está convencida de que su esposo hubiera estado muy orgulloso de que estuvieran en este museo, para que todos los torrelaveguenses y los aficionados al ciclismo.


Josefina Bedia, que mostró su alegría por haber podido asistir, a pocos días de cumplir 90 años, a este momento y recordó la emoción que sintió Trueba, «un hombre muy sencillo y muy bueno», cuando hace años la ciudad decidió dar su nombre a un pabellón deportivo.


La generosidad de Josefina Bedia también fue ensalzada por la alcaldesa de Torrelavega, que agradeció su gesto, al desprenderse de objetos de «gran valor sentimental e incluso económico», con los que los ciudadanos podrán conocer mejor la trayectoria deportiva y la vida personal de Vicente Trueba.


Blanca Rosa Gómez Morante dijo que es un orgullo para la ciudad contar con un deportista que fue una figura deportiva en su época y que permanece en el recuerdo de todos sus vecinos.


Por su parte, el presidente regional destacó la figura de La pulga de Torrelavega, cuya «personalidad carismática» ha hecho que muchos años después de que lograse sus triunfos deportivos, siga en la memoria de los torrelaveguenses y de los aficionados al ciclismo.


De la trayectoria deportiva de Trueba, se elogió el esfuerzo en una época, en los años 30, en que no había los medios ni el respaldo que tiene los ciclistas actuales, medios con los que el campeón torrelaveguense hubiera ganado el Tour.