El Ayuntamiento de Torrelavega incentivará la instalación de empresas en el polígono industrial La Espina, en Tanos-Viérnoles, con la aplicación de las máximas rebajas fiscales que permite la ley en las tasas de construcción y licencia de obra.
Esta medida se traducirá en una bonificación del 95 por ciento en los impuestos por construcciones, instalaciones y obras que precisen acometer las empresas que se asienten en el polígono, y del cien por cien en la cuota de licencia urbanística.
Además, para abaratar el precio final del suelo, el Ayuntamiento transmitirá gratuitamente a la Sociedad de Suelo Industrial Torrelavega (SITOR), que promueve el polígono, el diez por ciento del aprovechamiento urbanístico que le corresponde, lo que revertirá en una disminución de los costes de urbanización para los empresarios que se asienten en La Espina.
El concejal de Urbanismo, el socialista Jesús García, ha explicado que estas medidas supondrán para las empresas un ahorro del 7 por ciento en los costes de construcción privados (naves e instalaciones) y del 10 por ciento en el precio final del metro cuadrado de suelo industrial.
Así, se estima que el coste bruto del metro cuadrado en el polígono podrá rondar los 80 euros, lo que sumado a las bonificaciones en la construcción «supone que estemos en condiciones de hacer una de las ofertas económicas más atractivas de la región» para el asentamiento de empresas en el municipio, ha explicado Jesús García.
Estos incentivos municipales se recogerán en un convenio que la Gerencia de Urbanismo de Torrelavega establecerá con SITOR.
Además, esta sociedad suscribirá otro convenio con la Agencia de Desarrollo, al objeto de facilitar la comunicación directa entre las administraciones y los interesados en la ocupación del polígono.
A través de este acuerdo, la Agencia se encargará del análisis y estudio de todas las peticiones que se cursen desde las empresas, atenderá las consultas y facilitará información a empresarios y emprendedores, y gestionará los documentos que se requieran a los interesados en instalarse en La Espina.
Según García, «se trata de establecer unas condiciones que incentiven, fomenten y hagan más atractiva la ocupación» de ese suelo industrial en Tanos-Viérnoles, abaratando el coste del suelo y reduciendo los costes impositivos para el empresario.