Torrelavega prorroga la cesión de la finca municipal a Coorcopar por otros cinco años

El Ayuntamiento de Torrelavega ha renovado por cinco años más la cesión de uso de una finca municipal de 82.000 metros cuadrados a la Coordinadora contra el Paro (Coorcopar), tras valorar el interés social de los proyectos que dicha entidad desarrolla en esos terrenos.

El concejal de Hacienda, Aurelio Ruiz Toca, ha explicado que el Ayuntamiento abrió el pasado año un expediente para aclarar la situación de esos terrenos de la denominada Finca de los Soldados, en Sierrapando, cedidos en 1992 a Coorcopar para un proyecto social, y que se encontraba en precario al haber finalizado en 2002 la concesión.

El Consistorio acordó requerir a Coorcopar una nueva petición de uso del terreno, en la que se hiciera constar los proyectos que se desarrollan, a fin de valorar la conveniencia de firmar una nuevo acuerdo de cesión o reducir la superficie asignada, para que fuese utilizado por el centro especial de empleo Serca, de competencia municipal.

Pese a ello, el Ayuntamiento ha comprobado que la Coordinadora tiene confirmados buena parte de esos proyectos y previstos alguno más, ante lo cual se ha decidido seguir prestando su apoyo a Coorcopar.

Por ese motivo, se ha acordado renovar la cesión de uso de la Finca de los Soldados por cinco años más, prorrogables hasta un máximo de diez, «sin que ello vaya en detrimento de la expansión del Serca».

Según Ruiz Toca, se ha llegado a la conclusión de que es buena cosa para Torrelavega seguir apoyando ambos proyectos, ya que Coorcopar tiene los suyos y el Serca no tiene la necesidad inmediata de poder disponer de un poco más de terreno para los proyectos que tiene en marcha o en cartera.

El Ayuntamiento cedió en 1992 por 10 años 82.000 metros cuadrados de la llamada Finca de los Soldados, un antiguo acuartelamiento militar ubicado en Sierrapando, para que la coordinadora desarrollase el proyecto social denominado huertos familiares, cofinanciado por la Unión Europea.

Los huertos eran invernaderos donde parados de larga duración cultivaban hortalizas que luego vendían.